by Karla Montelongo
Imagínate decir algo y que aparezca.
Aladdin es una película que plantea la idea de un ser prácticamente omnipotente y no presente, con la simple orden de su amo es capaz de complacer casi cualquier deseo, sin embargo, la metáfora del genio nos habla de un ser que es tan poderoso que si no se es específico con lo que se desea esto se podría tornar de mal manera.
Los celulares podrían ser tomados como una representación simbólica de esta historia, aplicada a nuestros días y su uso en la tecnología moderna, nos presentamos como seres, que pareciera, somos incapaces de leer los términos y condiciones presentes en los contratos que firmamos, con ello otorgando prácticamente el derecho a perder lo que conocemos como privacidad, las grandes empresas tecnológicas y aquellos que se dedican al análisis de la Big Data y la gestión de estos a través de la inteligencia de negocios han demostrado que aquellos que más información brindan sobre sus hábitos de compra somos nosotros mismos a través de nuestras búsquedas e interacciones.
Existe una personalidad digital de nosotros, es decir, un ente que existe en lo más recóndito del internet y que reconoce qué edad tenemos, qué consumimos, qué nos gusta, y lo más alarmante, quizás cuánto dinero tenemos para tener acceso a ello, pero la verdadera pregunta es ¿El teléfono nos escucha todo el tiempo?
Si bien ya existe un trasfondo alrededor de esto, las quejas de los usuarios hacia productos como hecho dot o incluso las famosas grabaciones hechas por tu celular a través de tu cuenta de Google, realmente sería imposible que se almacenarán todos los datos todo el tiempo, por lo que tu celular al conocerte y reconocer tus hábitos también reconoce los puntos donde te encuentras más interesado en algunos productos y es ahí donde se activan estas búsquedas.
Sin embargo, los algoritmos cada vez son más finos y entienden mejor la percepción que tenemos, es por ellos que empresas como Meta han invertido tanto en el desarrollo del entendimiento de estas búsquedas, con la finalidad de en un futuro ser aquellos que puedan predecir tus futuras compras incluso antes de que tú lo sepas.
¿Te imaginas que el papel de baño llegué antes de que se acabé a la puerta de tu casa o que llegue nueva leche antes de que se caduque la otra?
Simplemente sería vivir en el futuro.
3 Comentarios. Dejar nuevo
Es interesante como a muchas personas suelen temer a que las empresas tengan información de nosotros pero también nosotros somos responsables de ello, ya que le brindamos toda nuestra información a nuestro celular o dispositivos. Desde mi punto como mercadóloga, puedo decir que es muy interesante como se pueden crear estrategias tan precisas para los navegantes.
Es cierto que el consumo ha ido evolucionando, y esto se debe a las estrategias y viceversa las estrategias se deben el comportamiento.
Los algoritmos manipulan nuestras aplicaciones y redes sociales para que, como usuarios, tengamos una mejor experiencia y al mismo tiempo brindemos datos para que las marcas se mantengan presente y les ayude en su posicionamiento. Es una muy buena estrategia.
La omnipresencia de los servicios tecnológicos es una realidad cada vez más cercana, con el IoT y la IA evolucionando a pasos agigantado es cuestión de tiempo para poder ordenar algo y que llegué en segundos. Se ha comprobado que en algunas aplicaciones el micrófono del teléfono se activa o incluso la cámara y es ahí cuando las alarmas se encienden, ya que con esto vienen muchos problemas éticos que pueden llegar a instancias legales